Vídeo 1:
El oído, determinante en el origen de la consciencia, es lo más próximo a lo secreto, no hay que olvidar que a los dioses se les escucha. A partir de la conciencia de la repetición el hombre se convierte en espectador de los ciclos, del eterno retorno de lo que una vez sucedió.
Vídeo 2:
El descubrimiento de la simetría y del ritmo, acompañado del descubrimiento de un centro. Oír el espacio significa captar el origen. El sonido como conjuro. El nacimiento del lenguaje como consecuencia de una resonancia craneal y una capacidad auditiva cada vez más evolucionada hasta llegar a la escucha de la armonía de las esferas pitagórica, la armonía cósmica.
Vídeo 3:
En el mundo actual, la individualidad aparece siempre en función del otro o lo otro y siempre insuficiente. / En el s. XVI se inauguró un camino, seguido hasta nuestros días, en el que la melodía aparece como instrumento de la expresividad personal. Sin embargo, en el s. XX se empezó a producir un retorno a la disolución de esa expresión personal, un retorno a la abstracción, a la espiritualización. Tres ejemplos de esta tendencia son los compositores Györgi Ligeti, Toshio Hosokawa y Morton Feldman de los que se escuchan algunos fragmentos.
Ramón Andrés, poeta, músico y ensayista de reconocido prestigio. Autor de numerosos libros, escribió en 2012 el: “Diccionario de música, mitología, magia y religión”.