Fragmentos de textos tradicionales que ilustran símbolos fundamentales agrupados por temas. En este caso los que se refieren a la Búsqueda: PLEGARIA / FE / EXILIO / BENDICIÓN. Edición, Raimon Arola y Lluïsa Vert

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Plegaria

«La plegaria es como una conversación secreta entre el Dios creado y el Dios increado, es decir, como el lazo de amor que une lo finito a lo infinito y que permite a la totalidad conocerse en Uno». (L. Cattiaux, El Mensaje Reencontrado 9, 52)

«Pídele a Dios las cosas que merecen ser concedidas por Dios». (Sexto, el Pitagórico, in Tesoro de sabiduría tradicional de W. Perry)

«Somos llevados de la súplica al objeto de la súplica, y familiarizándonos con ella nos asemejamos a ella, y así, de la imperfección, recibimos silenciosamente la perfección divina». (Jámblico, in Tesoro de sabiduría tradicional de W. Perry)

«Según Abú Hurayra, el profeta dijo: Dios dirá: Seré para mi adorador lo que el crea que debo ser. Estaré con él cada vez que me mencione; si me menciona en sí mismo, lo mencionaré en mi mismo; si me menciona en público, lo mencionaré yo mismo ante un público aún mayor; si se me acerca un palmo, yo me acercaré un codo; si él se me acerca un codo, yo me acercaré una braza, y si viene a mí al paso, iré hacia él al galope». (Ahâdîth del profeta Mahoma).

 

Fe

«Por ‘fe profunda’ no queremos decir no tener la menos duda, sino confiar en lo que el Buda prometió, que nunca abandona al pecador por malvado que éste pueda ser. Ha asegurado un nacimiento cierto en la Tierra Pura a aquellos que pronuncien su santo nombre aunque sólo sea una vez». (Hônen, maestro zen, in Tesoro de sabiduría tradicional de W. Perry)

«La fe es la sustancia de las cosas que se esperan y la comprobación de los hechos que no se ven». (Hebreos 11, 1)

«Vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios». (1 Corintios 2, 5)

«Si Cristo no ha resucitado, vana es nuestra predicación; vana también es vuestra fe». (1 Corintios 15, 14).

«Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? […]. Mirad los lirios del campo, cómo crecen. Ellos no trabajan ni hilan; pero os digo que ni aun Salomón, con toda su gloria, fue vestido como uno de ellos. Si Dios viste así la hierba del campo, que hoy está y mañana es echada en el horno, ¿no hará mucho más por vosotros, hombres de poca fe? […] Más bien, buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas». (Mateo 6, 25 y ss).

 

Exilio

«Nuestra razón es el muro que nos hace dudar del cielo. El absurdo es lo que nos hace renunciar al exilio sobre la tierra». (L. Cattiaux, El Mensaje Reencontrado 6, 11)

«Tal armonía está en las almas inmortales; pero hasta que cae está envuelta de barro que groseramente le aprisiona, no podemos escucharla». (Shakespeare, El mercader de Venecia )

«Necio exilio, dice el Señor, me lleva fijado en imagen pía». (E. d’Hooghvorst, Aforismos del Nuevo Mundo )

«Dijo Rabí Samuel: Antes de la destrucción del templo, la divina presencia permanecía en él, según el versículo: El Señor está en su templo santo. (Habacuc 2, 20). Pero desde su destrucción, la divina presencia se ha retirado a los cielos y por eso está dicho: El Señor en los cielos asentó su trono. (Salmos 103, 10). [.] Dijo rabí Aja: Nunca se apartó la divina presencia del muro occidental, pues está dicho: He aquí que se encuentra tras nuestro muro. (Cantares 2, 9) Y también: Sus ojos miran, sus pupilas distinguen a los hijos de los hombres. (Salmos 11, 4)». (Midras Éxodo Rabbah).

 

Bendición

«Si regasen con un vino tal la tierra de una tumba, el muerto reencontraría su alma y su cuerpo sería revivificado». (Omar ibn al Farid, Elogio del vino)

«Ven y ve: Cuando se encuentran justos en el mundo, las bendiciones son atraídas para los mundos, como está escrito: Te bendeciré […] y serás bendición (Génesis 21 , 2). ¿Por qué y serás bendición? Esto hace alusión al hecho de que, gracias a su mérito, serán bendecidos los mundos de arriba y de abajo, según está escrito: Todas las familias de la tierra serán bendecidas en ti. (Génesis 12, 3), o sea: los mundos de abajo. Y bendeciré a aquellos que te bendecirán, o sea: los mundos de arriba». (Zohar I , 87b)

«El Espíritu Santo vendrá a ti y la fuerza del Altísimo te cubrirá de su sombra. Por ello, el Ser santo que nacerá de ti será llamado Hijo de Dios». (Lucas 1, 35).

«Si este nacimiento sucede realmente, ninguna criatura puede entorpecerte, todo te señala a Dios y a este nacimiento. En el rayo encontramos una analogía. Cualquier cosa sobre la que caiga, sea árbol, animal u hombre, se vuelve hacia sí con el impacto. […] Así, todos aquellos a quienes este nacimiento acontece, se vuelven prontamente hacia este nacimiento con todo lo que hay en ellos, aunque sea terrenal. Más aún, incluso lo que anteriormente era un obstáculo no es ahora sino una ayuda. Tu rostro está vuelto tan plenamente hacia este nacimiento, sea lo que sea lo que veas y oigas, que no recibes nada salvo este nacimiento en todas las cosas» (Maestro Eckhart  in Tesoro de sabiduría tradicional de W. Perry)

OTROS SÍMBOLOS